Escuela Novohispana. México. Siglo XVIII.
"San Cristóbal, Judas de Santiago o Tadeo y San Antonio de Padua"
Óleo sobre tabla.
43 x 55 cm.
Composición de tres de los santos más antiguos y más rápidamente canonizados por la Iglesia, sobre un fondo paisajístico con arquitecturas, posiblemente de sus lugares de procedencia, y/o de distintos lugares donde ejercieron su prédica y evangelización.
A la izquierda, San Cristóbal, que etimológicamente significa “el que lleva a Cristo”, cuya devoción tuvo gran auge después de la Edad Media. Y al que se le considera patrón de los viajeros, caminantes, arrieros, barqueros, marineros, transportistas, atletas, conductores, pilotos y aviadores.
Al centro San Judas Tadeo, llamado Judas de Santiago en el evangelio de Lucas y en los Hechos de los Apóstoles. Uno “de los doce” al que se le personifica con una alabarda o hacha, o un sable shamsir de origen persa, arma a la que se atribuye su decapitación.
A la derecha San Antonio de Padua, sacerdote de la Orden Franciscana, predicador y teólogo portugués, venerado como santo y doctor de la Iglesia por el catolicismo.
En las arquitecturas vemos Licea o Canaán, donde nació y vivió Cristóbal; Tadeo con Nazaret o sus inmediaciones donde nace o algún lugar de Mesopotamia, Siria o Persia donde predicó y ejerció su ministerio; y el santo franciscano frente a Lisboa, alguna costa de Portugal, Italia o el mismo Padua.
Tres santos que formaban parte de las devociones de algún donante o rico que encarga la obra, bien para él o para ser expuesta y venerada en alguna iglesia por todos.