Previous Next
../fotosArticulos/33115/13.1.jpg
../fotosArticulos/33115/13.2.jpg
../fotosArticulos/33115/13.3.jpg
../fotosArticulos/33115/13.4.jpg
../fotosArticulos/33115/13.5.jpg
../fotosArticulos/33115/13.6.jpg
../fotosArticulos/33115/13.7.jpg
../fotosArticulos/33115/13.8.jpg
../fotosArticulos/33115/13.9.jpg
../fotosArticulos/33115/13.10.jpg

LOTE 13

Escuela hispanoflamenca. ¿Círculo de Alejo de Vahía? Circa 1500.

Estimación
12.000 € / 17.000 €

Escuela hispanoflamenca. ¿Círculo de Alejo de Vahía? Circa 1500.

"Santiago 'el Menor'"

Escultura en madera tallada, policromada y ligeramente dorada.

86 x 32 x 23 cm

Presentamos una magnífica escultura de Santiago “el Menor” o Santiago de Alfeo que quizás en origen pudo pertenecer a un Apostolado dispuesto en el banco de un retablo hispanoflamenco. Que formó parte de un retablo no cabe duda puesto que no tiene labrada la parte posterior, de hecho, aparece simplemente excavada para aligerar su peso.

El santo aparece erguido, con una de las piernas adelantada, movimiento que queda reflejado en la rodilla bajo la túnica. Gira y eleva la cabeza dirigiendo su mirada hacia el cielo, al tiempo que vuelve la palma de la mano izquierda hacia arriba para señalar hacia el cielo con el dedo índice. En la otra mano porta una porra o maza de batanero, atributo con el que se suele representar al apóstol Santiago “el Menor” y que, al mismo tiempo, fue el “instrumento” con el que fue martirizado ya que un batanero le rompió el cráneo con el garrotazo que le asestó con su maza. Viste una larga túnica que le cubre el cuerpo hasta los tobillos y que se encuentra ceñida a la cintura por un sencillo cinto. A pesar de que ha perdido parte de su policromía, la túnica iba decorada con delicados motivos florales dorados esgrafiados. Por encima tiene echado un ampuloso manto abierto atado en el hombro derecho, recogido en parte bajo este brazo y policromado con tonos rojizos por su parte exterior y verdosos por la interior, estando esta última decorada por una fina orla en su borde. También los motivos decorativos principales del manto son vegetales o florales. Ambas prendas van surcadas por gruesos plegados, curvos en el manto y horizontales en la túnica, teniendo una caída muy natural.

Las manos están labradas con notable naturalismo y delicadeza, teniendo todos y cada uno de los dedos individualizados según su tamaño y forma, e incluso se percibe que tiene labrados los tendones de la palma. La cabeza, como es habitual en los maestros de la corriente hispanoflamenca, que es la última del gótico en España, presenta forma ovalada, con un rostro de semblante ciertamente inexpresivo, cejas curvas, ojos almendrados, amplia nariz, en este caso de forma aguileña, boca pequeña y cerrada, y pómulos abultados. Peina una abundante cabellera simétrica que le cae hasta los hombros y está construida a base de infinidad de bucles trabajados a trépano, mismos motivos con lo concibe la abultada barba. El trabajo de todos estos cabellos es concienzudo y la labra profunda en algunos de estos bucles, de suerte que se llegan a lograr claroscuros.

Esta delicada pieza sería labrada en algún taller castellano de hacia el año 1500 por un notable maestro hispanoflamenco pues en ella se evidencia un claro origen nórdico, flamenco o germánico, en detalles como la cabeza ovalada, la forma de disponer el cabello a través de grandes bucles y mechones simétricos ondulados y entrelazados, la nariz afilada o la boca recta de labios finos. Creemos que este maestro conocía la obra del escultor nórdico Alejo de Vahía (ca.1450-ca.1515), que vivió gran parte de su vida en la localidad palentina de Becerril de Campos y regentó uno de los obradores más productivos de todo el ambiente castellano de finales del siglo XV y comienzos del siglo XVI, distribuyendo su obra por la mayor parte de las provincias que actualmente conforman la autonomía de Castilla y León, aunque con mayor profusión por el ámbito de la Tierra de Campos, amplia comarca que se extiende por las provincias de Palencia, Valladolid, León y Zamora. No sería extraño que esta obra realizada por un maestro del círculo de Alejo de Vahía, como así parecen indicarlos sus particulares rasgos estilístico, proceda de alguna población de esta comarca, y con mayores posibilidades para las provincias de Palencia o Valladolid.

 

Agradecemos a D. Javier Baladrón, doctor en Historia del Arte, por la identificación y catalogación de esta obra.